miércoles, 19 de noviembre de 2008

Nada tiene sentido...


El corazón no muere cuando deja de latir; el corazón muere cuando los latidos no tienen sentido...

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Pase lo que pase...


Pase lo que pase con nosotras, tu cuerpo
vivirá en mí... tierno, delicado,
tu forma de hacer el amor,
como la fronda semi enroscada del helecho en espiral en los bosques
recién bañados por el sol. Tus viajeros y generosos muslos
entre los cuales mi rostro entero se hunde una y otra vez...
la inocencia y sabiduría del lugar que mi lengua ha encontrado ahí...

La viva, insaciable danza de tus pezones en mi boca...
Tu forma de tocar, firme, protectora, investigándome,
tu lengua fuerte y tus finos dedos
llegando donde te estuve esperando por años,
en mi rosa, húmeda cueva...
Pase lo que pase, esto es.




Adrienne Rich.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Mostrar o demostrar




Cartas para Claudia..de JORGE BUCAY




En primer lugar, ¿ qué te pasa a ti que pretendes saber con certeza lo que el otro siente? Lo único válido, en todo caso, es lo que sientes tú, no lo que siente él. Lo demás es un intento de reasegurarte.

Pregúntate si TE sientes querida, necesitada, amada, y se fiel a ese sentir tuyo.

Porque imaginemos que alguien te quiere.

Te quiere mucho, muchísimo, y sin embargo tú no te sientes querida en absoluto: ¿para que sirve su cariño?

Imaginemos ahora todo lo contrario, alguien que te quiere muy poco, pero misteriosamente tú te sientes absolutamente querida: ¿vas a tomar la iniciativa de separarte de él porque no te dice lo mucho que te quiere o porque manifiesta que no sabe lo que siente?


¿Qué es mostrar?

¿Qué es demostrar?


Mostrar es hacer algo evidente para que tú lo veas.

Demostrar, en cambio, es una actitud que intenta probar algo para que tú lo creas.


Todo esto significa que cuando muestro, parto del prejuicio de que no ves y, cuando demuestro parto del prejuicio de que no crees.

Cuando mi relación contigo,no tiene prejuicios, cuando soy auténticamente yo y permito que seas auténticamente tú, entonces no prejuzgo. Por lo tanto, no te muestro nada, no demuestro que te quiero. Simplemente, soy yo mismo y hago lo que siento, sin ocuparme de que lo veas o de que lo creas.

Y lo veo tanto así que cuando me encuentro a mí mismo tratando de mostrar algo o queriendo demostrar lo que soy o lo que siento, me doy cuenta de que estoy manejando, de que no me estoy siendo fiel, de que estoy condicionado y condicionando. Y, últimamente, cuando muestro y demuestro, me siento ridículo.

Tienes todo el derecho de no ver y, sobre todo, el derecho de no creer. ¿Quién soy yo para querer que tú veas o creas todo lo que yo veo o creo?

Si todos estos argumentos no fueran suficientes, me pregunto: ¿ por qué supongo yo que no verías si no te mostrara o que no creerías si no lo demostrara?

Es evidente que la única manera es: " Yo, en tu lugar, no hubiera visto"; o " Yo, en tu lugar, no creería..."

¡ Proyección! Pura proyección.



La respuesta más hermosa a un " Te quiero mucho" es " Y yo me siento muy querida por ti".