Hace un tiempo que vivo en un sueño, irreal y magnífico a la vez.
Desde el día que te conocí nada volvió a ser igual, te fuiste colando poco a poco en mi corazón y todo cambió.
Tu haces que todo sea diferente y que cada día junto a tí sea inolvidable y único.
Tus palabras me llenan, tus besos me desbordan, tus caricias me llevan a otro mundo donde sólo existimos tu y yo.
Gracias por estar a mi lado, por aguantar mis dudas y mal humor, gracias por darme ese beso cuando lo necesito, por esa palabra cuando estoy mal, por esa sonrisa que me hace saber que todo está bien y por esa mirada que me desarma y me hace sentir que todo se detiene para mirar lo hermosos que son tus ojos.
Gracias por todo eso y mucho más...
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